jueves, 22 de enero de 2009

LA PRINCESA ESTA TRISTE


Hace muchos años, en un lugar muy lejano, existía una ciudad bellisima,
rodeada de vegetación y con abundante agua.

En esa ciudad había un palacio, en el cual vivía una princesa.
Una princesa que, según la gente de la ciudad, era muy bella, con una larga melena negra y unos ojos verdes como el agua marina.
Ultimamente se comentaba que el rey estaba muy preocupado.


"La princesa esta triste, que tendrá la princesa!

El rey había mandado ir a palacio, a lo mejores médicos del lugar
pero ninguno de ellos había conseguido dar una respuesta a su mal, por lo cual el rey desesperado ofrecía 1000 monedas de oro a quien consiguiera descubrir lo que le pasaba a su hija.

Por allí pasaron muchas personas, hombres y mujeres que prometían curarla, pero ninguno de ellos consiguió absolutamente nada.


Un día, apareció por la ciudad, un hombre con aspecto extraño
se notaba bien que no era de por allí y se presento al rey,
el rey extrañado por su indumentaria le pregunto quien era y de donde venia a lo que el le contesto:
.-Vengo de muy lejos, soy medico de almas y corazones.

El rey no daba crédito a lo que oía, pero estaba tan desesperado que le dejo ver a su hija.

Después de unas horas de estar el medico con la princesa
salió, y muy serio se dirigió al rey:

.- Su hija tiene su corazón y su alma vacíos, no tiene ninguna ilusión por seguir viviendo.
El rey no dejaba de mirarle anonadado, no daba crédito a lo que estaba escuchando y el medico de almas prosiguió diciendo:

Ella necesita vivir, usted la ama, la ama muchisimo pero ese amor la tiene enjaulada, no ha experimentado nada diferente que no sea usted y este palacio.
Necesita salir de estas paredes y sobre todo necesitar sentir otra clase de amor, aunque este le pueda producir dolor.
Llenar su corazón de sensaciones; sentir en su cuerpo las caricias, los besos,la pasión...en una palabra, VIVIR.



El rey puso el grito en el cielo, lo tomo por loco y lo echo del palacio.

Así que no hizo caso.


los médicos, charlatanes y demás, siguieron pasando por allí, sin éxito.

A los pocos meses, la princesa murió. Murió de tristeza.




Las personas podemos vivir en nuestros castillos,en nuestras jaulas de oro.
Tener todas nuestras necesidades materiales cubiertas, pero nuestros corazones y nuestras almas vacías. No quiero una jaula de oro, quiero mi vida llena de sensaciones, buenas y menos buenas, quiero sentir, aunque ello me suponga dolor, aunque ello me suponga sufrir.
No me ofrezcas riquezas, no me ofrezcas comodidades, dame tus sentimientos,tus miedos,tus alegrías, tus tristezas....SOLO TE QUIERO A TI.

4 comentarios:

Diario de nuestros pensamientos dijo...

es mejor amar y sufrir, que no amar nunca....
"solo te quiero a ti"
Saluditos

Anónimo dijo...

amar y sufrir van de la mano me temo
es bonito ver que a una la quieren :)
beso

ENCANTADORA DE DEMONIOS dijo...

Estoy totalmente de acuerdo, diario. No renunciare nunca a amar y dejar que me amen, aunque eso me suponga sufrir.
Anonimo, saber que te quieren es lo que te hace seguir dia a dia. Gracias por pasearte por aqui.

LUCERO dijo...

ME TOPE TU BLOG POR CASUALIDAD, ME ENCANTO TU HISTORIA..
MI LEMA: LA VIDA SE COMPONE DE SUEÑOS..SIN ELLOS NO SOY NADIE....